Tuve una vez un vecino que vivía en el séptimo piso de mi edificio, y que tenía las costumbres más extrañas que en mi vida he visto.
Cuando llegaba a casa, subía en el ascensor hasta el cuarto piso y desde allí hasta su casa, por las escaleras... Imaginaos que derroche de energía cuando volvía del "super" cargado de bolsas.
A mí nunca me ha importado bajar las escaleras andando, pero subir, ¡ni hablar, que me canso!. En cambio mi vecino bajaba todos los días hasta el portal en ascensor.
¿Por qué este comportamiento tan extraño? ¿Quería mantenerse en forma? ¿Le gustaba mirar a la "vecinita" del cuarto (que, por cierto, no estaba nada mal)?
¿¿¿...???
NOTA:
Aquí está la solución al Enigma del Vecino
4 COMENTARIOS:
vaya, dos pisos andando....podria ser una penitencia ;-))))
13 de octubre de 2009, 3:01Puedo, ando, puedo?
13 de octubre de 2009, 13:05;-O
¡Que no Storch!¡Que tú te sabes todos!
13 de octubre de 2009, 14:11:-O
Cachissss
15 de octubre de 2009, 1:49^.__.^
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